La mujer indígena nahua ha luchado por mantener su traje tradicional, aquel traje que le ha sido heredada de varias generaciones atrás, a diferencia que partir de la globalización muchas regiones y culturas de nuestro país han cambiado sus trajes tradicionales por el traje moderno y sintético; la sierra nororiental se resiste a perder su valiosa identidad. Lo contrario sucede con los hombres en donde solo algunos adultos mayores usan el traje blanco tradicional característico en la región.
En la época de mi infancia recuerdo que la mayoría de las mujeres usaban solo el traje blanco con el bordado conocido como pepenado en colores monocromáticos, las abuelas lo usaban en colores negros o azul marino oscuro. De la misma manera las fajas eran en colores rojos con pequeñas líneas blancas. Entrando en el nuevo milenio comenzaron a usarse con nuevos colores tanto en manta como en popelina.
La técnica del bordado de pepenado consiste en atravesar hilos paralelos sobre la tela base, esto forma diseños y sobresalta las figuras sobre el fondo blanco. Esta técnica de bordado ha sido heredada principalmente a las mujeres, son casos aislados en donde hombres hacen estos bordados. Se bordan hermosos pasajes de vegetación y animales. Se dice que en estos bordados las mujeres plasman su vida cotidiana, su relación con la naturaleza y el cuidado de la familia.
Cargando la mujer su bebe en el chal.
Entrelazando y bordando sobre su huacal
Cuidando el corral también está
Atizando el nexkon para almorzar.
La niña juega entre mariposas
El niño corriendo en el pastizal
La madre sudorosa cargando leña
Atraviesa el cerro con su mecapal.
Los días duros de abril y mayo
Las lluvias tardan en caer en el llano
La mujer con su cántaro rascando el pozo
Pues solo hay hojarasca y barro arenoso.
El candil ilumina la casa
Y sobre el metate aún queda mucha masa
Los niños juegan debajo de la mesa
Esperando a su mamá que les sirva la cena.
Pedro E. Huaxin.
Hablante náhuatl. Integrante del equipo de trabajo de la Red Binacional.